Me arrepiento de todos mis pensamientos,
de la locura de haberlos callado
de silenciarlos por la verguenza
de no atreverme a gritarlos.
ME arrepiento de cada uno de ellos,
desde la inocencía mas pura de mi mente
hasta los mas oscuros pasajes de mi corazón
me arrepiento y los sufro.
Creo en esta nueva forma
en decir cuanto he callado
y no temer a lo inevitable
no basta pensar, es necesario realizar.
no habrá mas pequeñeces que calle
ni existirán en mi silencios timidos
si es el sonido el que ausenta, será por reflexión
y cuanto calle, será porque no quiero decir...
Silencio, Adiós.
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me siento cómodo con un teclado en mis manos y un cursor titilando. Nadie puede asegurar con certeza que sucederá a continuación.
(No merezco tus flores) Nadie se merece nada y nosotros nos merecemos todo, mucho más que una hoja en blanco, que una máquina de letras en la cabeza y una descarga en pantalla.
ResponderEliminarNosotros nos merecemos el mundo, y los arrepentimientos.
Saludos.-