empezar

se tiene que volver a escuchar.
el latido particular
que la sincera bestia humana
puede dar.

no es la vulgaridad
ni la mediocridad...
es el talento en la fuerza
lo que le hace destacar...

porque es fácil tomar lo establecido
y resumirlo en cualquier papiro.
el desafio está entonces
en crear acerca de lo desconocido.

porque los inicios deben ser así
para que su verdad sea poderosa...
y es esa la importancia que tendrá
si poseen o no, verdadera fortaleza...

se ha desvirtuado la cosa
y ahora solo es excusa
y no funciona ni evoluciona
y el desperfecto se asoma.

corre y se desperdicia
toda la vitalidad
y se escapa, se esfuma
la poca originalidad...

se va y no se va a terminar...
es verdaderamente el momento
de decir basta y finalmente
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