No quería enamorarme.
intenté por todos los medios evitarlo.
corrí desesperado al saber que quizas estuviera cerca
pero así y todo mi desesperación no alcanzo.
Evite cuantas veces pude todo lo que me acercara
evadí, inventé, manipulé todos los recursos a mi alcance.
y eso no fue suficiente, no alcanzo para nada
No queria enamorarme, pero no podía evitarlo
Porque fijarme en tu persona?
que tenía de especial?
la mayoria de tus caracteristicas me hacían mal
y así y todo, no lo pude evitar...
las palabras no sirven de nada en estos casos
los gestos, las sutilezas son las que provocan destrozos
una misera mirada, quizás hasta distraida
es todo lo que hace falta.
Y un poco de tu perfume, de tu esencia
se ha quedado en mi
y estoy seguro que es eso
lo que me impide alejarme de tí.
Me regalaste unos instantes
que se me hacen imposibles olvidar
pero ahora tan solo puedo hacer eso.
esos momentos solo los puedo recordar
que egoista es tu ser,
que egocentrica tu personalidad
que idiota es mi esencia..
que autoestima baja tiene mi alma.
un sinnombre quedara como titulo
porque estas son las palabras imaginadas
sin sentido y sin destinataria
porque tan solo es mi mente, la que se engaña...
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me siento cómodo con un teclado en mis manos y un cursor titilando. Nadie puede asegurar con certeza que sucederá a continuación.
Me encanto en particular este texto... excelente!
ResponderEliminarLas palabras exactas... y en el momento exacto
Como hacer para evitar lo inevitable?
Como evitar enamorarse?
Ah... Misterio.
Papa Noel? No me gusta para nada ese personaje...
Pero pedi a mi familia unas alpargatas, y un libro de cuentos de Borges :)
Vos?
Es el amor. Tendré que ocultarme o que huir.
ResponderEliminarCrecen los muros de su cárcel, como en un sueño atroz.
La hermosa máscara ha cambiado, pero como siempre es la única.
¿De qué me servirán mis talismanes: el ejercicio de las letras, la vaga erudición, el aprendizaje de las palabras que usó el áspero Norte para cantar sus mares y sus espadas, la serena amistad, las galerías de la biblioteca, las cosas comunes, los hábitos, el joven amor de mi madre, la sombra militar de mis muertos, la noche intemporal, el sabor del sueño?
Estar contigo o no estar contigo es la medida de mi tiempo.
Ya el cántaro se quiebra sobre la fuente, ya el hombre se levanta a la voz del ave, ya se han oscurecido los que miran por las ventanas, pero la sombra no ha traído la paz.
Es, ya lo sé, el amor: la ansiedad y el alivio de oír tu voz, la espera y la memoria, el horror de vivir en lo sucesivo.
Es el amor con sus mitologías, con sus pequeñas magias inútiles.
Hay una esquina por la que no me atrevo a pasar.
Ya los ejércitos me cercan, las hordas.
(Esta habitación es irreal; ella no la ha visto.)
El nombre de una mujer me delata.
Me duele una mujer en todo el cuerpo.
Jorge Luis Borges.