La mano vacía

Se acomodo el traje como siempre, detalladamente se colocó las medias. lustró los zapatos, antes de colocarselos. Se revisó en el espejo como siempre 2 veces y luego seleccionó un reloj. Hoy era un día normal, como tantos otros , asique tomó el mas sencillo de sus relojes.
Por último tomó su galera y se la probó, se miró un perfil, se observó el otro y con un gesto de aceptación (que no tenía otro destinatario que su reflejo) salió al escenario.
La rutina establecida, fluyo con normalidad, en los momentos de risas llegaron las carcajadas, en los sorpresivos el asombro tomó la escena. Aquel pequeño instante donde el peligro asomaba muy levemente también fue parte de la rutina.
El gran final (y la razón por las que las personas asistián a su show) estaba por llegar. La gente se manifestaba ansiosa.
Observandolos desde el silencio, bajo las luces del escenario... comenzó la preparación para el gran final. Algunos amagues y unos entremeces coquetearon con risas inocentes, un poco de distracción mezclada con chachara fue suficiente. El Gran Final era un truco increible... se seleccionaba una persona totalmente al azar (realmente) y mostraba un objeto personal. Lo mantenía elevado mientras era ilumimado. El truco consistía en hacer desaparecer ese objeto a la vista de todos.
La gente no observaba el escenario, pero igualmente algo allí acontecía, una secuencia infinitamente ensayada que consistía en unos rodeos por el escenario una concentración y un unico movimiento que lograba el truco. el siguiente movimiento magnificaba la hazaña y hacía que el objeto apareciera en su mano, también a la vista de todos.

A la cuenta de 3 el objeto desaparecería. La tensión aumentaba, comenzó el conteo... 1...2...3!
el objeto desapareció sin dejar rastro alguno, todos en el lugar no daban a crédito. De repente poco a poco las personas comenzaron a observar el escenario.
En ese instante el segundo movimiento ya había sido realizado y el nerviosismo de la única persona que estaba sobre escena aumentaba: La mano estaba vacía.

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